Universidad de la Sabana

Colombia
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La Universidad de La Sabana es el resultado de años de trabajo de una comunidad académica, en busca de cultivar profesionales y seres humanos excelentes, que trabajen por el desarrollo del país y la sociedad.

Nuestros hitos a lo largo de la historia

La fundación y el barrio universitario
Traslado al campus del Puente del Común
La Universidad se proyecta al mundo
La Universidad en la cuarta revolución industrial


Todo empezó en agosto de 1971 con un grupo de 19 estudiantes. El Instituto Superior de Educación (INSE) —como se llamaba antes la Universidad de La Sabana— tuvo su primera sede en el tradicional barrio Quinta Camacho, en la localidad de Chapinero. Poco a poco, el Instituto empezó a ganar prestigio y capital humano. La sede la componían cerca de 22 casas y cada vez el sueño de convertirse en una Universidad se volvía más real.

La inspiración cristiana de San Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei, guio el derrotero de un grupo encabezado por Octavio Arizmendi Posada —nuestro primer rector— para fundar en 1979 lo que hoy conocemos como la Universidad de La Sabana. La Universidad inició su misión de buscar, descubrir, comunicar y conservar la verdad, inspirada en la visión cristiana del hombre y del mundo.

En 1983, la Universidad recibió la visita del Gran Canciller de La Sabana y prelado del Opus Dei, Beato Álvaro del Portillo, quien después de hablar con profesores, estudiantes y empleados, recomendó la adquisición de un campus más amplio en el que se pudiera seguir proyectando la visión educativa que por ese entonces se enseñaba en Quinta Camacho.

Para 1988, la Universidad comenzó su traslado hacia el norte de la capital y adiquiró los terrenos de una hermosa hacienda llamada Finca Bella Colombia, propiedad de René Caballero. Ladrillo a ladrillo, y con los años, a las casas coloniales la empezaron a rodear los diferentes edificios modernos que hoy albergan los salones y oficinas en los que día a día se llevan a cabo las actividades académicas y administrativas.

Año tras año, un Campus a Escala Humana tomó forma en el municipio de Chía. Las estructuras y las edificaciones hicieron una sinergia con la biodiversidad y la naturaleza de esta región de Cundinamarca, lo que a su vez acompañó el crecimiento académico de La Sabana que cada año se fortalece en profesores, estudiantes, programas académicos e infraestructura.